La Bolsa de Comercio de Rosario tuvo hoy actividad muy limitada, con una caída en las cotizaciones por el efecto de la baja de los commodities agrícolas en el Mercado de Chicago.
El contexto internacional y las fuertes bajas registradas en el mercado de granos de referencia de Estados Unidos tuvieron repercusiones en la plaza local mientras los operadores mantienen la cautela en sus operaciones.
El volumen negociado fue escaso, con una merma en la cantidad de compradores activos y pocas posiciones abiertas de compra.
De esta forma, se sintió la menor actividad en el maíz, a diferencia de lo acontecido en las sesiones anteriores y destacó la aparición de ofertas de adquisición con entregas diferidas para el caso del sorgo.
El único valor abierto de compra de soja fue para la entrega diferida en mayo, la cual se ubicó en US$ 200 la tonelada y hubo operaciones con descarga en el Gran Rosario en valores desde los US$ 220/t para entregas en marzo.
La mejor oferta abierta de compra por girasol se ubicó en los US$ 225/t, para la oleaginosa con entrega inmediata al igual que para la posición abril.
La actividad comercial en el mercado de trigo continuó escasa, hubo una sola oferta abierta de compra para la entrega diferida en abril, que se ubicó en los US$ 185 la tonelada, mientras en el mercado a término el precio para la posición marzo ajustó en US$ 194 la tonelada.
En tanto, la mejor oferta abierta de compra por maíz con descarga inmediata se ubicó en los US$ 135 la tonelada respectivamente.
Por maíz con entrega en abril/mayo el valor ofrecido se situó en los US$ 135 la tonelada, representando una merma de US$ 5/t respecto de la rueda de negociaciones previa.
Mientras, sobresalió la aparición de ofertas abiertas de compra para el sorgo con descargas diferidas, siendo algo que no se observaba hace largo tiempo.
De esta forma, el valor ofrecido por el sorgo con descarga en junio se ubicó en los US$ 135 la tonelada, con julio a US$ 130/t.
Por su parte, el Mercado de Chicago prosiguió con su sentimiento bajista y los principales cultivos culminaron nuevamente con bajas importantes en sus cotizaciones.
En el caso del trigo, se vio afectado por las mermas generales en el mercado de granos y acciones por el temor a las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus.
Los futuros de maíz finalizaron con las mayores caídas en términos porcentuales entre los principales cultivos analizados.
Así, los comerciantes ignoraron los datos sumamente favorables de ventas de exportación semanales que se ubicaron por encima de las expectativas de los analistas.
Los futuros de soja no encontraron alivio, con mínimos del contrato para la posición de mayo.
A su vez, los datos de ventas de exportación continúan muy bajos dificultando impulsos sostenidos en la oleaginosa. El Diario