Victorica enfrenta una crisis hídrica: vecinos sin agua potable en pleno verano
- La Pampa
- 6 ene
- 2 Min. de lectura
Desde hace aproximadamente dos semanas, la mitad de los vecinos y vecinas de Victorica, una localidad del oeste pampeano, no tienen acceso al agua potable, según reclamos emitidos a través de la radio local Loventué. La falta del recurso ha generado una profunda preocupación, en un contexto agravado por la alerta de altas temperaturas emitida por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

A pesar de los numerosos reclamos realizados tanto a la Cooperativa Eléctrica de Victorica (CeVic) como a la Municipalidad, ambas instituciones han minimizado el problema. Sin embargo, un reciente comunicado de la CeVic solicitando a la población un uso racional del agua desató la indignación vecinal, ya que contradice sus anteriores declaraciones.
Vecinos alzan su voz en redes sociales
La impotencia y el enojo de los vecinos no tardaron en trasladarse a las redes sociales. Una vecina propuso dejar de pagar el servicio como forma de protesta, iniciativa que recibió un amplio respaldo. Otro vecino, visiblemente afectado, expresó:"Hay situaciones que son desesperantes: no tener para cocinar, para ducharse. ¿Hasta cuándo Victorica sufrirá este problema? Nadie lo sabe".
Un problema histórico agravado por el crecimiento poblacional
La falta de agua potable en Victorica no es un fenómeno nuevo, especialmente en los meses de verano. Históricamente, la localidad ha enfrentado esta situación debido a la limitada capacidad de las napas y al creciente consumo en épocas de calor. Si bien en el pasado se implementaron soluciones temporales, estas no se sostuvieron a largo plazo, dejando a la comunidad nuevamente vulnerable.
El crecimiento urbano, con la creación de nuevos barrios, no ha sido acompañado por un aumento proporcional en la capacidad de provisión de agua. Además, no existe un sistema de penalización económica para aquellos que exceden el consumo básico, lo que ha agravado el desequilibrio en la distribución.
Opciones desesperadas y soluciones estructurales
Frente a la falta de agua, muchos vecinos recurren a contratar camiones cisterna para llenar sus tanques elevados o trasladan bidones desde zonas donde el agua sí llega. Otros mencionan sistemas utilizados en lugares como el Gran Buenos Aires o Venezuela, donde el agua se almacena en cisternas subterráneas y se eleva con bombas eléctricas. Sin embargo, estas medidas implican inversiones significativas que no todos pueden afrontar.
Un llamado a la reflexión comunitaria
La crisis también plantea interrogantes sobre la participación ciudadana en la gestión de la CeVic y el rol del Municipio. Durante la última asamblea de la cooperativa, ninguno de los actuales quejosos alzó la voz para exigir información o plantear soluciones. Este contexto pone en evidencia la importancia de una ciudadanía más activa y comprometida, tanto en las cooperativas como en la política local.
Mientras tanto, los vecinos esperan respuestas concretas y urgentes. La falta de agua potable es un problema que no puede esperar, especialmente en un verano que amenaza con ser implacable.