Fuerte respaldo ruralista a la Barrera Sanitaria Patagónica: SRA y CRA le dan la espalda al reclamo histórico de La Pampa
- La Pampa
- 25 mar
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En el marco de la Exposición Rural de Puerto San Julián, en Santa Cruz, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, y su par de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Carlos Castagnani, se pronunciaron en defensa de la continuidad de la Barrera Sanitaria del río Colorado, dejando en evidencia su desacuerdo con el reclamo histórico de la provincia de La Pampa, que desde hace años denuncia la medida como una “barrera comercial”.

Ambos dirigentes rurales no solo criticaron la forma en que el Gobierno nacional intentó avanzar con la eliminación de la barrera, sino que también reconocieron haber intercedido para que se suspendiera la medida impulsada recientemente por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), que por unas horas habilitó el ingreso de carne con hueso a la Patagonia, región considerada libre de fiebre aftosa sin vacunación.
Una medida que generó fuerte rechazo pampeano
En La Pampa, la decisión del Gobierno nacional de dar marcha atrás con la eliminación de la barrera generó fuertes críticas. La ministra de la Producción, Fernanda González, consideró que "esto no es de un país serio", mientras que el exgobernador Carlos Verna fue más directo en su reclamo hacia el presidente Javier Milei: “No sea cagón y mantenga la medida”, lanzó, en defensa de los intereses comerciales y ganaderos del norte patagónico.
La provincia sostiene desde hace años que la barrera sanitaria funciona, en la práctica, como una barrera económica que impide el ingreso de sus carnes a una región donde los precios son más elevados, y cuestiona que ya no existen argumentos sanitarios sólidos para mantener esa restricción.
El campo nacional toma postura
Sin embargo, los principales referentes de las entidades rurales nacionales tomaron distancia del reclamo pampeano. Nicolás Pino expresó su malestar con la forma en que se comunicó la medida: “No está bueno enterarse de un día para otro, sin explicaciones previas. Genera angustia y entorpece mucho el trabajo que hacemos los productores, que siempre es pensando hacia adelante”, afirmó durante su discurso.
Pino destacó que si bien la decisión del Gobierno fue intempestiva, al menos se valoró que los funcionarios “escuchan cuando las instituciones del campo hablan”, en referencia a la suspensión de la medida y a la apertura de un plazo de 90 días para su análisis.
Por su parte, Carlos Castagnani fue aún más tajante: “Nos encontramos con una medida inconsulta que generó malestar e incertidumbre. Ahora se abre una instancia de diálogo de 90 días, pero debe ser con la participación de los gobiernos provinciales y los productores, para lograr una legislación justa que resguarde el status sanitario logrado”.
El presidente de CRA defendió con firmeza el sistema que permite a la Patagonia mantenerse como zona libre de fiebre aftosa sin vacunación, lo que consideró clave para la producción y exportación de carne ovina. “Ese estatus sanitario costó años de trabajo y es un activo que no podemos poner en riesgo”, sentenció.
La tensión entre salud animal y libre comercio
Aunque la medida fue revertida parcialmente tras la presión de los gobernadores patagónicos, el tema está lejos de haberse cerrado. Senasa estableció un período de 90 días para revisar la cuestión, abriendo la puerta a un nuevo debate sobre los límites entre la protección sanitaria y la libre circulación de productos agropecuarios dentro del país.
La tensión es clara: mientras los productores pampeanos exigen acceso a un mercado más amplio y con mejores precios, los patagónicos se aferran a la protección que garantiza un estatus sanitario privilegiado. Y en medio del debate, las principales entidades rurales nacionales ya marcaron su posición, dándole un claro respaldo al sur del país y dejando a La Pampa más sola en su reclamo histórico.