“Lo más importante para el cumplimiento de la cuota alimentaria es que las personas tengan voluntad de cumplirla”, afirmó la defensora oficial en lo civil, Gisela Kondolf, durante una entrevista en Canal 3.
El reportaje se enmarcó en el convenio de cooperación que firmaron el Poder Judicial y la emisora estatal para difundir y visibilizar temas judiciales cotidianos y de interés general, y profundizar el acceso a justicia de la sociedad pampeana.
Por este ciclo ya habían pasado la responsable de la Oficina de la Mujer y Violencia Doméstica, Marien Cazenave, para referirse a la tarea de ese organismo; y la jueza de familia, niñas, niños y adolescentes de General Pico, Alejandra Campos, para hablar sobre las obligaciones de padres y madres.
En esta ocasión, Kondolf profundizó sobre la cuota alimentaria, es decir el importe y/o prestaciones que debe darle el progenitor no conviviente a sus hijos para colaborar con los gastos destinados a su bienestar (educación, salud, vestimenta, entretenimiento, etc.); ya que la manutención de ellos hasta los 21 años es una obligación parental establecida en el Código Civil y Comercial de la Nación.
La defensora civil explicó cuáles son los pasos que una madre o padre debe realizar ante la Oficina de Orientación Jurídica, dependiente del Ministerio Público de la Defensa, para acceder a la defensa oficial y, a partir de allí, reclamar el cumplimiento y la actualización de la cuota.
“Antes de que el reclamo se judicialice, existe una instancia previa que es la mediación prejudicial obligatoria. Allí un mediador o mediadora intenta, en forma conjunta con las partes, llegar a un acuerdo; si no lo logra, ahí sí se abre la instancia judicial”, detalló.
Otro aspecto por el que se consultó a Kondolf fue el de los parámetros que tiene un juez o jueza para monetizar la cuota. “El Código no establece un porcentaje, sino que depende del nivel de vida de la niña, niño o adolescente, de los ingresos del progenitor, de la cantidad de hijos… En definitiva, depende de cada caso en particular. Sin embargo es mucho más difícil calcularlo cuando ese progenitor vive de tareas ocasionales o trabaja en negro”. Además la defensora señaló que la ley permite cobrarle a los abuelos/as en caso de que el padre o la madre incumpla con el acuerdo homologado.
Posteriormente, y aun con la demanda judicializada, el juez o jueza que la tramita volverá a tratar de alcanzar un acuerdo entre las partes, porque “no es lo mismo que ese juez o jueza fije una cuota alimentaria –o un determinado régimen comunicacional o de visitas– a que padres y madres se pongan de acuerdo. Por eso siempre decimos que el mejor acuerdo es aquel donde las partes muestran una voluntad sincera para cumplirlo”, subrayó Kondolf.
En la entrevista en el programa “Encuentro de tarde”, con la periodista Luján Fischer Herlein, la funcionaria judicial detalló además de que la cuota no es solo dineraria, sino que forma parte de ella “el acompañamiento a los hijos, sus traslados a la escuela y otras actividades”.
El acuerdo firmado entre el Superior Tribunal de Justicia y Canal 3 estableció como objetivo principal el de “profundizar los vínculos de cooperación entre las partes con el propósito de realizar y difundir micros audiovisuales sobre los mecanismos de acceso a la justicia, formas alternativas de resolución de conflictos y temas judiciales de interés para la población de la provincia de La Pampa”. Fuente El Diario de La Pampa