Análisis solicitados por Aguas del Colorado y la Secretaría de Recursos Hídricos certificaron que el agua distribuida a través del Acueducto del Río Colorado es apta para el consumo humano, pese a que en los últimos días presentó alteraciones en su aroma y sabor. El fenómeno, según confirmaron los estudios, obedece a una presencia extraordinaria de algas en el río.
Refuerzo de controles y medidas correctivas
Si bien las pruebas realizadas ratifican la seguridad del agua, tanto Aguas del Colorado SAPEM como el Co.I.R.Co. implementaron maniobras correctivas en el proceso de potabilización para mitigar la alteración sensorial. Además, se reforzaron los sistemas de control durante la última semana para monitorear la calidad del recurso hídrico.
Los análisis bacteriológicos y fisicoquímicos de rutina, correspondientes al 9 de marzo de 2025, confirmaron que los parámetros del agua no han sufrido modificaciones respecto a los registros previos, lo que garantiza su potabilidad.
Investigación sobre el origen del fenómeno
Para profundizar en el origen de la alteración, se encargaron análisis específicos a la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad Nacional de La Pampa, utilizando muestras extraídas en la toma del río. Los estudios determinaron que el olor proviene de un crecimiento masivo de fitoplancton en la cuenca baja del Río Colorado, un fenómeno natural propiciado por condiciones climáticas favorables.
Desde Co.I.R.Co., entre los días 2 y 4 de marzo, se tomaron muestras en cinco puntos clave de la cuenca:
Puente Dique (25 de Mayo, La Pampa).
Lago Casa de Piedra.
Toma de agua de la empresa Aguas del Colorado.
Localidad de Río Colorado (Río Negro) - La Adela.
El Gualicho.
Dichas muestras fueron enviadas a un laboratorio especializado en Bahía Blanca, cuyos resultados confirmaron que el agua es segura para el consumo.
Monitoreo continuo y alcance del fenómeno
Las tareas de control continúan en las 16 localidades intermedias abastecidas por el Acueducto del Río Colorado, hasta su llegada a la ciudad de Santa Rosa. Además, se detectó que el mismo fenómeno afectó a ciudades de Buenos Aires y Río Negro, donde el agua consumida por la población no generó ningún impacto en la salud.
Las autoridades aseguran que se mantendrá un monitoreo permanente y que las condiciones del agua seguirán siendo evaluadas para garantizar la calidad y seguridad del recurso para todos los usuarios.
