El subsecretario de Industria, Comercio y PyMEs, Silvano Tonellotto, insistió en que sigue vigente el deseo del empresario industrial. Miguel Ángel Fosati había dicho que su sueño era un traslado masivo a La Pampa.
El interés de la empresa John Foos para instalarse en La Pampa y poner a producir la planta que era de Calzar sigue vigente, según tienen entendido en el Gobierno Provincial.
“Todo lo que es inversiones siempre lleva un proceso. Venimos hablando con la gente de John Foos desde julio, en un contexto que es adverso”, aclaró el subsecretario de Industria, Comercio y PyMEs, Silvano Tonellotto, a un periodista de El Diario.
“Seguimos en contacto con la empresa. Hemos manifestado constantemente un interés de la empresa, lo que estoy en condiciones de afirmar es el interés de instalarse en La Pampa”, insistió.
John Foos había puesto expectativas en el resultado electoral: dio a entender que si ganaba la propuesta de Alberto Fernández había más posibilidades de concretar el desembarco.
Ahora, el funcionario pampeano aseguró que están “observando la economía y el proceso de estabilización. La intención está intacta y los distintos procesos que se dan en la toma de decisiones han ido teniendo muchas variables positivas”.
“Tenemos una provincia baja en conflictividad, y eso suma en cuanto a las variables de radicación. Ellos ahora están en negociaciones por un inmueble, pero tengamos en cuenta que la inversión es de unos 300 millones de pesos”, añadió Tonellotto.
En su momento, el dueño de John Foos, Miguel Ángel Fosati, dejó trascender su interés para quedarse con la planta de Alpargatas en La Pampa.
“A los industriales nunca nos van a ver en el suelo, siempre tendremos buenos fierros y equipamiento, hablo desde la desesperanza, hoy no puedo ni exportar. Pero me estoy preparando. Mi sueño es mudar toda la planta a Santa Rosa, arrancar con entre 250 y 300 trabajadores y tener 1300 en nueve años. Todo depende de la política económica que venga, que vuelva a impulsar la producción nacional”, aseveró el empresario meses atrás, en plena campaña electoral.
En un contexto en el que 39.000 operarios de la industria del calzado perdieron su trabajo en el último año, 19 empresas internacionales dejaron de producir y las pocas fábricas que quedaron funcionan a menos del 50% de su capacidad, el empresario dijo entonces que quería comprar la planta.
Fosati arrancó como periodista y locutor. En 1980 instaló una fábrica de calzados en Haedo y desde 1984 comenzó a producir zapatillas vulcanizadas John Foos.
En 1999 mudó su fábrica a Beccar. Hace 35 años que produce y construyó una marca histórica gracias a aplicar el “just in time”. No tiene stock, fabrica a pedido. Hoy produce un millón de pares de zapatillas al año.
En aquella entrevista con BAE, desde Estados Unidos, contó que ultimaba los detalles para comprar la planta pampeana. Antes recorrió Catamarca, La Rioja, Tucumán y San Luis, donde los cierres dejaron sin trabajo a más de 1200 personas.
“No se puede creer, Alpargatas me vendió el laboratorio completo con 27 equipos de primera tecnología. Eso un industrial nato jamás lo vendería. Me perdí de comprar la textil de Catamarca por un día. Mi idea es mudar todo a La Pampa. En Beccar tengo una manzana y media a siete cuadras de Libertador, los que laburamos somos un fastidio. En las intendencias solo quieren hacer torres”, indicó.
Alpargatas cerró en septiembre del año pasado. En ese momento hubo 130 despidos. El complejo sigue cerrado. El Diario