MAS DE 10 MIL PAMPEANOS DEJARON SU PRESTADORA PRIVADA
Una familia tipo, en una prestadora de primer nivel, debe pagar aproximadamente 35 mil pesos mensuales. La caída en los últimos veinte meses alcanza al 25,8 por ciento. Para una persona sola, un plan de una prepaga oscila entre los 6 mil y 7.500 pesos por mes.
Según un informe de la consultora «iProfesional» el impacto de la crisis en la población pampeana genera que cada vez haya mayor dificultad para que familias de clase media accedan a la medicina privada. Estiman que de 1,2 millones de afiliados que abandonó su prepaga en el país en los últimos 20 meses, 10.200 son de La Pampa, es decir un 0,6% del total. Se fugan algo así como unos 28 afiliados diarios.
En 2016, los afiliados voluntarios sumaban 12,7% y derivaban sus aportes otro 20 por ciento. En poco más de un año y medio se verificó una merma de 25,8 puntos porcentuales y representan unos 10.200 beneficiarios menos en Santa Rosa, General Pico, Toay y Eduardo Castex. Hay 120.209 pampeanos que tienen cobertura a través de las obras sociales que aumentaron su padrón por la vuelta de los que derivaban sus aportes a prepagas, aunque la ola de desempleo hizo que muchos se fugaran a los hospitales Lucio Molas y Gobernador Centeno que prestan un 11,5% de sus servicios de emergencias.
El costo de los planes de las prepagas oscila de 6 mil y 7.500 mensuales en promedio para una persona de edad mediana, y mucho más alto para adultos mayores. Sin embargo, en ese lapso aprobaron nuevos aumentos a empresas de medicina prepaga para ajustar sus aranceles en un 17,5% en tres tramos que se aplicaron en julio, agosto y septiembre. Ante este panorama ahora se ofrecen planes «low cost», sobre los que aumentaron los controles pues se trata de coberturas parciales con cuotas económicas.
Sangría en la clase media.
El constante aumento de la cuota, la pérdida del poder adquisitivo de la población en general y el cambio de afiliación hacia obras sociales ha dado como resultado una disminución de la cantidad de afiliados hacia estos servicios. Estiman que 8,8% de los comprovincianos cuenta con un plan de medicina prepaga o prepagado voluntario. Mientras que un 34,1% tiene la cobertura prepaga por la derivación de aportes a través de una Obra social y un 25,2% en el Sempre, 20,4% del Pami y un 11,5% se atiende en el hospital público pues o no tienen obra social o teniéndola no es cubierta junto a más de 10 mil pampeanos que tienen pensiones no contributivas y son atendidas por quienes tengan el Programa Federal (Profe) que brinda cobertura médica a titulares de pensiones asistenciales, graciables y pensiones por leyes especiales.
El presupuesto de este año le asigna en La Pampa 6.874 millones de pesos al sector salud (15,53% del presupuesto total) pero la gran pregunta es si el Estado provincial tendrá la capacidad para amortiguar el impacto del corrimiento de la atención privada a la pública. Los hospitales públicos no te pueden negar atención médica aún si tenés obra social o prepaga, pero si te piden los datos de tu obra social o prepaga para cobrarle la atención brindada. Es más, en el Presupuesto 2019 de La Pampa hay previstos como ingresos no tributarios 132.764.954 pesos como Recaudación de Servicios de Salud por aquellos cobros.
A mediados de 2017 la cantidad de afiliados a la medicina prepaga en la provincia llegaba a casi 40 mil personas, cifra ésta que cayó un 25,8% es decir a menos de 20 mil. Sucede que en lo que va del año, la medicina prepaga subió el valor de sus cuotas de 36 a 40 por ciento. Para tener una somera idea de los costos, hoy es prácticamente imposible pagar menos de 35 mil en una de primera línea para una familia tipo, conformada por un matrimonio con dos hijos.
La sangría de afiliados por los altos costos lo sufren aquí una larga lista de empresas de medicina privada como Swiss Medical, OSDE, Galeno, Aca Salud, Sancor Salud, Federada Salud, Simepa, Medicus, Accord y Omint.
Una legislación compleja.
Desde la reglamentación de la ley de empresas de medicina privada (EMP) se aprobaron 30 aumentos de distinta magnitud, que significaron un incremento acumulado en el valor de las cuotas de 537% (el último aumento fue en agosto de 2019). En 2018 se autorizaron cinco subas que acumularon un 40,8% de aumento en la cuota y 2019 estará muy por encima de la inflación.
El índice representativo de una canasta de diferentes valores de planes de medicina prepaga, indica que aquellas aumentaron 47 veces los valores de la cuota desde la salida de la convertibilidad. Se observa una aceleración de estos aumentos en los últimos años, luego de la implementación de la Ley 26.682 que regula a las EMP. Ahora se está en presencia de los denominados Planes Low Cost llamado «Plan Parcial de Cobertura Prestacional Obligatoria» que incluye consultas médicas, medicamentos, internación clínica y quirúrgica, prácticas de baja y alta complejidad y medicamentos en internación.
A través de estos planes parciales, las pueden dejar de prestar el 100% del Programa Médico Obligatorio (PMO) y, así, reducir la cobertura a prestaciones básicas, con consentimiento del afiliado. Ahora allí está la lupa de la Superintendencia de Seguros de Salud (SSSalud) y del Fondo Nacional de Salud (Fonasa) con una serie de controles sobre los planes de cobertura parcial que ofrecen las prepagas, que deben ajustarse a la ley que establece el marco regulatorio de la actividad. La Arena
JUAN JOSE REYES - ECONOMISTA