Gastón Fernández nació en Guatraché hace 24 años. Integra la Selección Argentina de Volley y en estos últimos Juegos Panamericanos realizados en Lima ganó junto a su equipo la medalla dorada.
Uno de los mayores sueños de cualquier deportista es llevar la camiseta de su país. Gastón lo logró. Semanas atrás, él junto a sus compañeros de equipo de la Selección Argentina de Volley pudieron llegar a lo más alto: ganar la medalla de oro en los Juegos Panamericanos realizados en Lima, Perú.
“La verdad que nunca imaginé que con tan poca edad juegue en este nivel y gane tantos torneos”, comenzó contando el pampeano Gastón Fernández, en diálogo con LA ARENA, y continuó “Llámase así Sudamericanos, Copas Panamericanas (en diversos países) y los dos más importantes: el Mundial U23 en Egipto y los Juegos Panamericanos en Lima. Estoy muy feliz y sueño con llegar a los Juegos Olímpicos algún día”. Apenas 24 años de su nacimiento y ya cuenta con grandes reconocimientos en el mundo del deporte, sin embargo quizás lo más llamativo de la vida de Fernández es la manera en que comenzó a practicar esta disciplina.
Un poco de su historia
“Fue todo muy raro y rápido”, expresó Gastón al preguntarle cómo fueron sus inicios con el Volley. “Yo tenía 15 años y era arquero de fútbol en el Club Atlético Pampero de Guatraché. Un día teníamos fecha libre y el profe de educación física -y ahora actual entrenador de Unidos del Sur Volley-, me dijo si lo podía acompañar a llevar a dos chicos amigos míos a una concentración de la selección pampeana en Santa Rosa. Le dije que sí y ahí fue cuando arrancó todo”, contó el joven. Fue así entonces que, su pertenencia al deporte en el que actualmente se dedica profesionalmente llegó a su vida por “casualidad”, sin buscarlo y sin siquiera haber pensado en esa posibilidad dado que se desarrollaba como arquero del equipo de su localidad.
“En esa ocasión me vieron y me invitaron a jugar este hermoso deporte. Probé y me fui adaptando de a poco. Mientras tanto yo seguía practicando las dos disciplinas: fútbol y volley. Pasaron los días y me llegó una convocatoria de la Selección Nacional para una captación de talentos. Se trataba de tres días en el Cenard (Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo). Lo evaluamos con mi familia y fuimos”, detalló Fernández con una sencillez digna de admirar para una historia que al menos es llamativa. Miles de jovenes del país sueñan con lograr ocupar un lugar en la Selección Nacional y a Gastón los éxitos le fueron sucediendo de una manera rápida y sin mayores complicaciones.
Las emociones que el Volley le despertaron a Gastón son perfectamente expresadas por él: “En esa convocatoria quedé. Fue allí cuando empecé y dije este deporte es para mí. Si bien soy muy futbolero y a esa edad (15 años) debuté en primera, me decidí por el Volley y hoy en día vivo felizmente de esto”. A los 16 años, Gastón fue a vivir a Buenos Aires. Allí comenzó a jugar para el Club Ciudad de Buenos Aires durante tres años. Actualmente y desde hace cuatro años, pertenece al equipo de Club Atlético River Plate.
Ganar el oro con la camiseta de tu país
“Ganar el oro en los Juegos fue hermoso. Además de sentir mucha felicidad y emoción creo que es un reconocimiento a todo el esfuerzo que hago día a día porque además de jugar profesionalmente al Volley, estudio Educación Física y la verdad es que me lleva mucho tiempo poderme dedicar a las dos cosas. Afortunadamente lo llevo muy bien. Personalmente creo que es importante tener el día de mañana un título universitario ya que la vida del deportista es corta”, contó Gastón y demostró que sus objetivos y aspiraciones para su vida las tiene bien en claro.
El día a día de Gastón se desenvuelve con muchas ocupaciones y tareas, la mayoría de ellas dedicadas a su desarrollo y crecimiento profesional. La llegada al deporte del Volley fue de casualidad para este joven pampeano, sin embargo, sus logros no fueron fáciles. Su disciplina y entrega constante así lo demuestran.
Vivir lejos de sus orígenes
“A la Pampa voy muy poco. Generalmente suelo ir para las fiestas que es donde tengo una semana y es en ese momento donde me puedo tomar el tiempo para descansar y poder disfrutar de mi familia, amigos, etc”. “Obviamente que extraño mi provincia pero a decir verdad no se me hace tan difícil ya que me vine desde chico a Buenos Aires y traté de adaptarme lo más rápido que pude”, detalló Fernández, con algo de nostalgia pero dejando en claro que para lograr cumplir con los desafíos personales, siempre hay una cuota de sacrificio.
Gastón está de novio y eso lo ayuda a paliar los sentimientos que le surgen por vivir lejos de su familia. En Guatraché están todas sus raíces: su padre Guillermo, su madre Marcela, sus hermanos Tobías e Iván, como así también “muchos amigos y seres queridos”, que esperan ansiosos cada receso del destacado deportista para “pasar tiempo” juntos. fuente La Arena