Existen algunas cifras que son indicadores que revelan la buena calidad de vida del pueblo pampeano, junto a niveles considerables de tranquilidad y seguridad pública. Lamentablemente, esta condición ganada y perpetuada durante muchos años la vamos perdiendo (como el resto del país) debido a las políticas implementadas por el Gobierno nacional de Cambiemos que está "derramando" malestar hacia las provincias.
Durante esta nota se realiza un repaso de los números que, en forma sintética, ayudan a describir la situación de la Provincia en el contexto nacional.
Los datos son los disponibles en cada fuente, algunos son actuales, otros están desactualizados, pero igualmente resultan útiles a los fines de elaborar un ranking en un momento determinado y facilitar la comparación.
Otros datos e indicadores están siendo eliminados u ocultados por el propio Indec, lo que complica poder contar con ellos al momento del análisis.
Lo importante es que de la evaluación de una treintena de variables brinda como resultado una caracterización de la Provincia cuya definición queda al arbitrio de cada uno, pero que personalmente creo corresponde señalarla así: La Pampa es una de las provincias con mejor calidad de vida.
Cifras que la caracterizan
Existen algunas cifras que son indicadores que revelan la buena calidad de vida del pueblo pampeano, junto a niveles considerables de tranquilidad y seguridad pública. En esta oportunidad, intentando rescatar los de más jerarquía, se sintetizaron en pocos números y también pocas palabras.
A la vez se señala que hay aspectos que algunos pueden consideran negativos, pero en realidad no lo son tanto y hacen a la características del pampeano (como la poca densidad de población, bajo saldo migratorio, baja tasa de fecundidad y de natalidad).
En este aspecto habrá que profundizar en la estrategia de planificación de las familias pampeanas, aunque algunos fenómenos demográficos acompañan tendencias nacionales y hasta globales como son el envejecimiento poblacional, la urbanización y las migraciones.
Algunos indicadores que hacen a la calidad de vida:
• IDH (Índice Desarrollo Humano): con 0,85 es quinta en el ranking de mejor índice.
• Esperanza de Vida 2010: v 73,1 m 79,5 (agregando 4,95 y 4,36 entre 1990 y 2010). Es el 6° valor en v y el 12° en m.
• Mortalidad infantil: con 7,9 por mil nacidos vivos se ubica en 6to. lugar.
• Mortalidad Materna: junto a Santa Fe y CABA tienen la más baja del país 1,9%.
• Distribución del ingreso (Gini): con un índice de 0,359 es 6ta. mejor ubicada.
• NBI: 5,7% en personas. Primera mejor posicionada.
• Reducción NBI últimos 30 años -74%. Primera en reducción.
• Hacinamiento Crítico: 3,4%. Segunda mejor posicionada.
• Calidad Constructiva de las viviendas 76,3. Cuarta mejor posicionada.
• Viviendas deficitarias: con el 5,1% es la 2da. con menor cantidad.
• Cobertura en salud de la población pampeana: 4to. lugar con v 65,4% m 70,0%.
• Cobertura en salud mayores 65 años: 95,5 %. Primera mejor posicionada.
• Pobreza personas: 26,3 % (nac 27,3).
• Indigencia: 4,2 (nac 4,9).
• Desocupación Aglomerado S. Rosa-Toay: 13,1 %.
• Trabajo no registrado: 26,2% (región pampeana 36,2%).
• Analfabetismo jóvenes 18 a 29 a: 0,8 % ( total país 1%).
• Salud de la población: el 14% tiene salud regular o mala (la más baja del país).
• Actividad física de la población: con el 60% ocupa 3er. lugar entre las provincias.
• Prevalencia de obesidad la más baja con 16,5%.
• Tamaño medio de los hogares 2,9 la 2da. más baja del país.
• Tasa fecundidad madre adolescente con el 6,0% es la 6ta. entre las provincias
• Utilización de computadora entre 6-19 años es de 81,5% (el más alto).
• Aumento 2001-2010 en servicio de gas 15,3% (2da. en el país) llegando al 85,8% de los hogares.
• Aumento 2001-2010 en servicio de cloacas 14,1% (4ta. en el país) llegando al 60% de los hogares.
• Aumento 2001-2010 en servicio de agua de red 4% llegando al 88% de los hogares.
• Disponibilidad de computadora en el hogar 47,7 %.
• Disponibilidad de celulares en el hogar 89,9 quinto lugar entre provincias.
• Endeudamiento cero del estado provincial.
También se ha agregado el Índice de Desarrollo Humano. Para nuestra Provincia, en el informe (2016), se señala un índice de 0,854 ubicándola como la quinta con mejor índice (más alto que el promedio nacional de 0,848) luego de Tierra del Fuego, CABA, Chubut y Santa Cruz (0,861) pero muy lejos de las que tienen peores índice como Santiago del Estero, Chaco, Formosa o Corrientes.
Índice de Desarrollo Humano
Es un indicador complejo multidimensional poco conocido elaborado por el PNUD de Naciones Unidas llamado Índice de Desarrollo Humano (IDH) basado principalmente en trabajos del premio Nobel de economía Amartya Sen (Sen 2003). Según el enfoque del desarrollo humano, el bienestar de las personas es más que su nivel de ingresos.
En otras palabras, más allá del ingreso y los bienes a los que puede acceder una persona, el desarrollo de sus capacidades -es decir, qué puede hacer, lograr o alcanzar a través del acceso a los bienes- influirá en gran medida en su nivel de bienestar.
Considera tres dimensiones básicas: gozar de una vida larga y saludable (salud), acceder al conocimiento necesario para un buen desempeño social y laboral (educación), y tener un nivel de vida decente (ingreso). Dice este organismo que en las últimas décadas la población mundial expandió considerablemente sus capacidades y libertades reales, es decir su desarrollo humano.
Entre 1970-2010, la esperanza de vida mundial creció de 59 a 70, la alfabetización subió del 60 al 83%, la matriculación combinada paso del 55 al 70% y el ingreso per cápita de 5.100 a 10.600 dólares. Esto ocurrió más allá de avances y retrocesos temporales y de desigualdades manifiestas entre países y dentro de ellos.
No es una isla
Lamentablemente esta condición ganada y perpetuada durante muchos años la vamos perdiendo (como el resto del país) debido a las políticas implementadas por el Gobierno nacional de Cambiemos que está “derramando” malestar hacia las provincias. Seguro que algunas de las 25 empresas diarias que se cierran en el país son de nuestra provincia, cosa que solemos ver.
Entonces los esfuerzos que se hagan desde las gestiones provinciales o municipales no alcanzan cuando aquellas tiñen todo el espacio territorial y cuelan sin piedad en cada provincia, cada pueblo, cada empresa, cada hogar, cada familia, cada bolsillo.
Prueba de ello en nuestro pago es el aumento de la tasa de desocupación, de empleo en negro, de la cancelación del fondo Fonavi, del Incentivo docente, la eliminación de fondos de programas en salud y educación, del Fondo Sojero, del subsidio al transporte, a la energía, los Repro, la caída de jubilaciones Anses y del salario real, etc.
El empobrecimiento de un pueblo y la destrucción del consumo no puede ser mala praxis, es deliberado. Es decisión política.
Si a los indicadores señalados los desagregáramos por año quedaría claramente expuestos que a partir del gobierno de Cambiemos en casi todas las provincias han empeorado. También se ha alertado sobre el impacto que producirán en la calidad de vida de los pampeanos porque la incidencia de la Nación, a pesar del apoyo del gobierno provincial a estatales y empresas, tiene un peso muy grande en un mercado de trabajo donde cerca del 75% proviene de personas ocupadas en el sector privado y este sector está siendo duramente castigado como ahora lo confiesan las cámaras empresariales además de los propios gremios privados de representación nacional.
Esta destrucción seguirá ocurriendo hasta vaya a saber qué segundo semestre prometido, golpeando fuerte en la microeconomía de las empresas, de los bolsillos de las familias, de los distintos niveles de los estados locales. Entonces, cuando llegue ese momento sea con este gobierno o con quien lo suceda, como en las batallas, habrá que hacer un relevamiento de bajas y daños ocasionados que sin duda será grande y doloroso.
Elecciones, una chance
Como ya comenzó la campaña política, los candidatos de los partidos de La Pampa, deberían explicitar qué metas y qué evolución, se proponen alcanzar sobre la base del estado actual de la provincia y los indicadores señalados arriba. Pero además deberán decirnos qué políticas, qué acciones, qué programas desarrollarán para mejorarlos.
Debería exigírsele sobre todo a los candidatos opositores que responden al signo político del gobierno nacional, sin evasivas, hablen de ellos, porque cada día seguirán empeorando.
Por Roberto Daniel Rodríguez para INFOPICO