Pasaron cinco elecciones provinciales hasta ahora, y La Pampa espera la suya el 19 de mayo. Hay una clara tendencia en las cinco votaciones, más allá de las particularidades locales. ¿Qué se puede repetir y qué no en La Pampa?
La caída de Cambiemos
Hubo cinco elecciones hasta ahora en el país, después de que el 17 de febrero se desarrollaran las internas en La Pampa que inauguraron el año electoral. Fueron las PASO de Chubut y San Juan y el domingo que pasó en Entre Ríos y las generales provinciales en Neuquén y Río Negro. En todas, hubo tendencias claras: la victoria contundente de los oficialismos y las derrotas de Cambiemos, en algunos casos quedando muy relegados.
Algunos suman las internas de La Pampa al hilo de comicios perdidos por Macri (con la derrota de Carlos Mac Allister del PRO). Sin embargo, la lista pampeana de Cambiemos que ahora tiene fórmula radical sigue siendo parte de la marca macrista. Y por más que se quieran hacer los desentendidos, ocultando la denominación y cambiando los colores cambiemitas, no dejan de representar la fuerza del macrismo en la provincia. De hecho, Daniel Kroneberger, como se lo han recordado, ha votado todas las leyes enviadas por Casa Rosada, entre ellas la repudiada reforma previsional. De ahí a que sus candidatos tuvieran que salir mediáticamente en los últimos días contraatacar al PJ para no quedar arrinconados.
Oficialistas y unidos
El analista político Carlos Fara en el sitio Letra P destacó que el domingo en Entre Ríos volvió a ganar el oficialismo y que, dentro de lo esperado, fue un triunfo cómodo de un peronismo unido. El escenario político de Entre Ríos, como el de San Juan, en ese sentido, se parece mucho más a La Pampa que las tres provincias patagónicas donde hay fuerzas provinciales. En La Pampa, San Juan y Entre Ríos gobierna el PJ y Cambiemos es la segunda fuerza. Los dos gobernadores, Sergio Uñac y Gustavo Bordet, están lejos del kirchnerismo. En ambas el triunfo fue contundente y Cambiemos quedó muy alejado, y disminuido.
Los oficialismos han triunfado en las cinco elecciones frente a un Cambiemos golpeado por la crisis económica. Macri tiene el nivel más bajo de aprobación desde que asumió, con una alta imagen negativa, y eso repercute en cada candidato local. El mal humor es palpable en la sociedad. En Entre Ríos, en 2017, con la "ola amarilla" a favor, el candidato de Cambiemos, Atilio Benedetti, había ganado la elección legislativa con el 53%. Ahora apenas cosechó el 33%. En La Pampa hace dos años, el PJ había remontado las PASO legislativas para ganarla por un margen estrechísimo frente a la boleta del PRO. Coincidencias de dos provincias del espacio pampeano.
Diferencias con los otros escenarios
Los oficialismos cuentan con el fenómeno, recuerda Fara, de la "cancha inclinada": disponen de cantidad de recursos notablemente dispares a los de sus opositores. La competencia es desigual. La oposición, frente a esto, puede hacerle fuerza con un gobierno nacional del mismo color y sobre todo si está fortalecido, como ocurrió en La Pampa en 2017. "Hoy estamos lejos de presentar competencia", se sincera un legislador radical al autor.