“Esperamos que la recaudación provincial alcance para todos los gastos”. Esa es prácticamente la premisa con la que parece haber sido confeccionado el presupuesto que hoy, por la mayoría de 16 votos, fue aprobado. Es así porque, como fundamentó el diputado Roberto Robledo (PJ) se ha incrementado el presupuesto de 2019 en un 48% respecto al de este año pero el ajuste que sobre todas las provincias hace caer el gobierno nacional, obligará a que la Provincia afronte el financiamiento de programas nacionales.
El diputado Ricardo Consiglio (Frepam) el que cuestionó la falta de crecimiento y desarrollo de la provincia. “Nada de eso se podía esperar de una provincia que dedica el 86% de su presupuesto para los gastos corrientes, es decir el pago de sueldos”, dijo. También cargó contra el incremento del impuesto a los ingresos brutos, la ubicación 23° de La Pampa en el índice de transparencia presupuestaria y por ser “expulsora” de sus jóvenes. Y calificó al polideportivo de Santa Rosa como “un gustito del gobierno provincial que pagamos bastante caro” todos los pampeanos.
El diputado Eduardo Tindiglia (Frente para la Victoria) valoró el presupuesto. Igual, reclamó un mayor compromiso en el fortalecimiento de la economía popular y las cooperativas de trabajo, el cupo de puestos de trabajo para transexuales -“que hoy se ven obligadas a la prostitución y su promedio de expectativa de vida es de 35 años”, dijo- y una constante reparación simbólica a las víctimas del terrorismo de Estado. “Es un presupuesto que mantiene el porcentaje destinado a los trabajadores, como así también los programas Rucaluhé y Nehuentún y mientras el Banco Nación se descapitaliza, el Banco de La Pampa, por una decisión política, se capitaliza”.
Luego el diputado Héctor Fazzini (MID) se quejó de que “fuera tan exiguo el tiempo” que tuvieron para analizar el presupuesto, que el mismo no fuera “para nada claro” y que “constantemente se vapulee al gobierno nacional” en su tratamiento.
El legislador Daniel Robledo (Pueblo Nuevo) reconoció “el esfuerzo del gobierno provincial en un escenario nacional preocupante donde la gente está desesperada” y reclamó estadísticas. “También se deben redoblar los esfuerzos por cumplir con el axioma peronista de que el trabajo dignifica y creemos en una sola raza (sic, NdeR: la sentencia es “clase”) de hombres, los que trabajan”.
A su vez, el diputado Espartaco Marin (PJ) destacó las “virtudes” del presupuesto. “No tenemos déficit primario ni financiero, esto es no tenemos deuda”, dijo. “La municipalidad de Santa Rosa gobernada por Cambiemos destina el 92% de su presupuesto a gastos corrientes”. Luego resaltó una serie de logros de los últimos tres años en los que la provincia fue gobernada por Carlos Verna. “Al megaestadio -sentenció- lo va a techar este gobierno justicialista y si no, lo hará el próximo que también será justicialista”.
Marín también recordó que en el plan de mitigación de Santa Rosa el gobierno provincial se comprometió a invertir 262 millones y lo hizo, mientras que el gobierno de la ciudad, se comprometió a invertir 120 millones y sólo puso 5 millones ochocientos mil”.
Consiglio le respondió. “La Pampa es como un kiosco familiar que hace 35 años estaba bien administrado y vivían seis personas de él y hoy, 35 años después, sigue estando bien administrado, pero viven sólo 3 personas de él y tiene la mitad de la mercadería de entonces”, dijo.
El diputado Carlos Bruno (Frepam) se sumó: dijo que cuando Francisco Torroba dejó de ser intendente de Santa Rosa, ésta estaba equilibrada. “Cuatro años después cuando tras una administración peronista, le tocó asumir a Leandro Altolaguirre se encontró con una deuda de 240 millones de pesos y hoy está ya nuevamente equilibrada y si bien las cloacas estuvieron colapsadas, hoy tenemos menos problemas”, expresó.
La diputada Josefina Díaz (Propuesta Federal) se envalentonó con las próximas elecciones. “Si los reclamos y las respuestas ante la discusión presupuestaria han sido estos tres años los mismos es porque algo está pasando y no anda bien, esperemos que el año que viene cuando estemos discutiendo el presupuesto, la película la estemos rodando nosotros (por Cambiemos)”, dijo.
Roberto Robledo le respondió a Díaz. “La Pampa no es una isla y hemos sufrido un recorte feroz en la obra pública y para crecer se necesitan de los recursos nacionales”, dijo. Marín acotó que Santa Rosa está peor que hace 3 años con una deuda inconmensurable con Aguas del Colorado. Diario Textual