La desilusión por el voto de Marino entre las mujeres radicales. Cecilia Roigé, militante feminista, reveló que le mandó mensajes hasta último momento antes de la votación de la sesión de esta semana.
La militante feminista de la UCR, Cecilia Roigé, confió esta semana que “hasta último momento” estuvo “dándole argumentos a (Juan Carlos) Marino para que modificara su postura" en la sesión durante la cual finalmente naufragó el proyecto de legalización del aborto que había logrado media sanción en la Cámara de Diputados.
La secretaria del Concejo Deliberante de Santa Rosa consideró un error que el radicalismo pampeano no propiciara la discusión partidaria para fijar una posición frente al tema. A nivel nacional si existió esa discusión entre las mujeres radicales, diferenció.
“Recién ahora estoy pasando el mal trago, es una gran desilusión”, confesó en declaraciones radiales. Aunque aclaró que “eso no nos quita fuerza para seguir luchando, hace 15 años que estamos luchando en pos de la ley de interrupción voluntaria del embarazo”.
La militante feminista reveló que “hasta último momento estuve dándole argumentos al senador Marino para que él modificara su postura. Sabemos que él tiene una gran influencia en el bloque. Yo soy un cuatro de copas y lo único que puedo hacer es pelear por lo que creo que corresponde y por los derechos de las mujeres que desean abortar, o que desean ser madre”.
“Le daba argumentos de ampliación de derechos, la esperanza la teníamos, necesitábamos los votos del radicalismo para dar vuelta esto y no los tuvimos”, lamentó. “Esto no hace más que hacernos fuertes en la calle, la pibada aprendió más de educación sexual integral en estos 90 días que está el tema en debate, a lo que le dieron en la escuela desde que esta la ley de Educación SexuaI Integral, que nunca se aplicó como debiera”, consignó.
“El debate no era aborto sí o aborto no, a ninguna mujer le gusta abortar, no se embaraza para abortar. Se embaraza si lo desea y espera un hijo deseado y amado o se embaraza porque falla algo, esa es la cuestión”, completó.
Cabe recordar que el senador pampeano no hizo uso de la palabra durante la sesión del miércoles y jueves. Pero después cuestionó a la conducción del radicalismo que lamentó el voto en alineamiento con los antiderechos y se quejó de haber sufrido presiones. El legislador consideró importante evaluar una consulta popular. “Vivimos en democracia y necesitamos aprender a respetar a quien puede opinar diferente y eso no lo convierte ni en retrogrado ni en asesino. En este debate no hay ganadores ni perdedores”, se defendió. El Diario