Un hombre que se encontraba prófugo de la Justicia neuquina fue atrapado por cometer un insólito error: llamó a sus allegados para invitarlos a su fiesta de cumpleaños en La Pampa. Había sido condenado en 2017 por violar durante cinco años a la hija de su pareja.
El portal La Mañana Neuquén indicó que se trata de Fernando Seguel, de 50 años, que fue condenado en octubre de 2017 por haber violado a su hijastra durante cinco años en el paraje Camino Toma de Agua, ubicado en Sauzal Bonito, donde vivía junto a su mamá y sus cuatro hermanos.
Los reiterados abusos comenzaron cuando la nena tenía 8 años y continuaron hasta los 13, cuando fue alojada en un hogar de menores por situación de maltrato, violencia y abuso sexual.
Durante el juicio se estableció que para concretar los atroces abusos, Seguel amenazaba a la nena con hacerle algo a sus hermanitos y que además ejercía violencia física hacia ella y su mamá.
Frente a esto, la Justicia neuquina lo condenó por abuso sexual con acceso carnal reiterado y le impuso una pena de 13 años y seis meses de prisión efectiva.
En marzo, cinco meses después de haber sido condenado y antes de comenzar a cumplir la pena, el hombre dejó de presentarse en la Comisaría Sexta de Plaza Huincul como tenía establecido. Esto alertó a la Justicia, que ordenó rápidamente el pedido de captura internacional.
Desde ese momento, comenzó su búsqueda y se realizaron distintas diligencias hasta que la semana pasada se obtuvo un dato certero de su ubicación a raíz de intervenciones telefónicas. El procedimiento se realizó en conjunto con la Policía de La Pampa y se logró capturar al hombre.
De acuerdo con lo explicado por el fiscal Gastón Liotard a ese portal neuquino, en vísperas de su cumpleaños 50, el hombre llamó a sus familiares y allegados de Cutral Có para invitarlos al festejo. “Fue una operación de muchas semanas de trabajo donde se obtuvo que esta persona había llamado a varias personas porque estaba organizando su cumpleaños en una estancia en La Pampa”, sostuvo el fiscal.