Una unión transitoria de empresas integrada por las constructoras Rovella Carranza SA, Mota-Engil Latin America BV (Portugal) y JCR SA fue la que ofreció el precio más bajo en la apertura de sobres de la licitación de las obras que el gobierno nacional realizará en la ruta nacional 5 (Corredor B), que incluyen la autopista Santa Rosa-Anguil. Estuvo por debajo del presupuesto oficial de 1233 millones de pesos.
El consorcio ofertó 827 millones de dólares (valor actual) y 153 millones a percibir anualmente por diez años.
Le siguieron CCA Civil Panamá SA (EE.UU.) – Green SA, con 1.175 millones y 212,9 millones, respectivamente; Techint Compañía Técnica Internacional SACI – Acciona Concesiones S.L. (España), 1.373 y 258,5 millones; Helport SA – Panedile SAICFeI – SA Obras y Servicios Copasa (España) – Eleprint, 1.603 y 296,2 millones; MSU Infraestructura SA – UCSA SA – Inversiones PPP SAI, 1.648 y 305 millones; y Benito Roggio e Hijos SA – José Chediack SAICA, con una oferta de 1.739 y 323,6 millones de dólares, respectivamente.
Desde el Ministerio de Transporte de la Nación destacaron que se recibieron ofertas que estuvieron un 33% por debajo de los precios proyectados. De la licitación también formó parte del Ministerio de Finanzas, dado el carácter especial que presenta el programa de Participación Público Privada, para la construcción de una red de autopistas y rutas seguras que abarcará seis corredores, de los cuales el “B”, corresponde a la ruta nacional 5, desde Luján hasta Santa Rosa.
Ayer, en la sede de Vialidad Nacional, en Capital Federal, se realizó la apertura de las 32 ofertas económicas que realizaron los diez consorcios que se presentaron compuestos por 19 empresas nacionales y siete internacionales. “Para determinar los ganadores de la licitación, se analizará la mejor combinación de las ofertas para cada corredor que, en su conjunto, representen un menor costo para el Estado. Cada oferente podrá ganar hasta dos corredores”, explicaron desde Transporte.
“Las PPP demostraron ser una herramienta sólida para que podamos hacer las obras que el país necesita para seguir generando en empleo, para crecer, para desarrollarse y, fundamentalmente, para mejorar la seguridad vial y terminar con las rutas de la muerte”, dijo el ministro Guillermo Dietrich.