EXHIBEN JUEGOS Y JUGUETES ANTIGUOS
Grandes y chicos pueden apreciar juguetes que marcaron la infancia de muchos winifredenses y una época del país donde hasta una empresa de alimentos se dedicaba a la fabricación de productos de hojalata para los niños. En la muestra retro, el 99 por ciento son nacionales.
Juegos y juguetes antiguos muy bien conservados están expuestos desde el sábado en el Museo de la Comunidad de Winifreda- esquina de avenida Alfonsín y España-, en una muestra que podrá visitarse en principio hasta el viernes 18 de mayo, cuando se celebrará el Día Internacional de los Museos.
Muñecas, juegos de té, autitos de colección, muñequitos pin y pon y playmóvil, ladrillitos de encastre Rasti, fabricados en diferentes décadas en el país pueden verse junto a un rompecabezas, álbum de figuritas, una armónica para niños, una calesita a pila, un conejo a cuerda, un lote de bolitas, enciclopedias, revistas infantiles, libros de cuentos y la obra literaria de Julio Verne “20.000 leguas de viaje submarino”. Hay también juegos artesanales hechos con chapa y madera, que vecinos conservan desde su niñez y los acercaron a la exhibición. Un coleccionista de antigüedades llevó un transporte repartidor de dulce de leche y un avión con una reseña histórica: “Entre 1934 y 1959 la firma Matarazzo, renombrada también en la industria alimentaria, fabricó una extensa variedad de juguetes de hojalata”.
En tiempos actuales dominados por los juegos electrónicos, se habilitó esta muestra retro como un homenaje a la industria juguetera del país, que llegó a ser muy pujante. “Son juguetes de distintas décadas, que hemos reunido entre nuestras familias, amigos y allegados a la Revista del Museo. Fueron prestados, pero quienes quieran donar este tipo de material pueden hacerlo porque en las casas no perduran mucho en el tiempo, a veces por la propia actividad que tienen los niños sobre los juguetes, se rompen o se los tira, entonces invitamos a los winifredenses a que nos acerquen estos objetos u otros que tengan para que este Museo siga creciendo", expresó la secretaria de Cultura, Claudia Visbeek. “La industria del juguete se remonta hacia la década del cuarenta cuando muchas fábricas nacieron con el impulso del gobierno peronista. Muchas fabricaban muñecas y otros rubros como cochecitos, que lamentablemente en la década del setenta con la introducción de la importación durante la época del proceso (militar) varias cerraron sus puertas. Después hubo algún tipo de recuperación pero nunca volvimos a tener tantas fábricas, que eran muy importantes ya que generaban recursos y daban trabajo a mucha gente”, recordó la funcionaria. “Hoy estamos en la misma situación de aquellos años, van cayendo estas industrias y hay mucha proliferación de juguetes importados. En esta muestra, el 99 por ciento son nacionales y algunos artesanales construidos por vecinos que tenían habilidades en la mecánica”, señaló.
El viernes, a partir de las 18, la visitarán los niños que concurren al taller de arte de la profesora Verónica Bianco. También están invitados los adultos y alumnos de la escuela primaria, secundaria y establecimientos rurales.
Veinte años después
El sábado se presentó el cuarto número de la Revista del Museo (Nueva Epoca), editada por el taller municipal de historia, que funciona en la Casa de la Cultura. Un artículo se titula ¡Han pasado 20 años!, y es una nota periodística publicada en mayo de 1998 en un semanario castense titulada “Reciclado de residuos sólidos orgánicos” con la bajada “El Eco Club vuelve a funcionar”. Hace referencia a lo sucedido el 15 de mayo de 1998. Aquél día “se volvieron a reunir los integrantes del Eco Club, conformado por alumnos de los distintos ciclos educativos para definir junto a las autoridades municipales y los representantes de la Fupamdei acciones tendientes a la iniciación del reciclado de residuos orgánicos y la inauguración de la planta de lombricompuesto”, se narra. Dos décadas después, el municipio local volvió a relanzar un nuevo programa de separación y recolección diferenciada de residuos urbanos domiciliarios. “El plan comenzó hace 20 años, necesitaba ajustes, hoy podríamos tener todo el pueblo separando y no teniendo un basural a cielo abierto tan impresionante como el que tenemos”, dijo Visbeek. “Lamentablemente, no se prosiguió con otras gestiones de gobierno y hoy estamos con una situación complicada con respecto al basurero. Los municipios pequeños no tienen otra opción que separar la basura domiciliaria”, agregó y solicitó a los frentistas incluidos en el plan que colaboren separando correctamente los residuos orgánicos, inorgánicos y sanitarios.
< Luis Barbaschi para LA ARENA 15/05/2018 >