RECAMBIO EN LA DIRECCIÓN DEL HOSPITAL "JUAN SMITH" DE WINIFREDA
La joven pediatra Florencia Carnicero, renunció al cargo de directora del hospital “Juan Smith” de Winifreda y fue reemplazada por la médica generalista Daiana Lebed. Ambas vienen trabajando juntas desde junio del año pasado cuando Lebed se sumó al equipo de salud local, integrado también por la doctora Leticia Ferrando.
El recambio de autoridades en la dirección del centro sanitario se produjo el 12 de marzo pasado, cuando Carnicero -nativa de esta localidad- presentó su renuncia indeclinable por “motivos particulares”. Había asumido en junio del año pasado tras la jubilación de Ilvia García. Dos meses después era puesta en funciones por el ex ministro de Salud, Rubén Ojuez, quien le había deseado “éxitos” en su gestión. Se supo que Carnicero renunció invocando “razones personales”, ajenas al funcionamiento del hospital, donde sigue desempeñando su especialidad.
Su sucesora, reveló que la llamaron desde la Zona Sanitaria para ofrecerle el cargo por recomendación de su predecesora.”Pedí tiempo para pensarlo y finalmente acepté. No tengo experiencia en gestión hospitalaria, si una formación muy básica, por eso es un gran desafío para mí y está bueno, lo tomo como algo nuevo en mi carrera”, expresó Lebed.
La dirección conlleva la realización de “muchos trámites administrativos y gestión de recursos, que obviamente me van a restar un poco de tiempo a la atención del consultorio, ya no podré atender la misma cantidad de pacientes porque al menos una vez por semana me voy a tener que dedicar de lleno a hacer gestiones ante Salud Pública”.
“Mismos lineamientos”.
Consultada sobre si no se le hará insostenible la conducción del hospital, respondió: “Eso nunca se sabe, veremos las contingencias que vayan surgiendo dentro del equipo de salud, conozco al personal y todos estamos con ganas de hacer cosas. La idea es seguir con los mismos lineamientos: fortalecer el trabajo comunitario, la prevención y promoción de salud, la parte asistencial y el seguimiento de los pacientes con patologías crónicas”.
Al respecto, mencionó que las más frecuentes son la hipertensión arterial, diabetes, obesidad y el tabaquismo en la población adulta del pueblo. “Estamos viendo mucha obesidad infantil y sobrepeso”, advirtió. Las causas “son multifactoriales” y no residen solamente en la mala alimentación, que es la principal. El factor tecnológico juega en contra de la salud.
“Los niños pasan mucho tiempo al frente de las pantallas (celulares, computadoras, tablets), son dos horas de sedentarismo que favorecen a la obesidad, pero también tiene que ver con factores genéticos y biológicos hasta con los ambientes familiares que tienen los chicos, la violencia dentro del hogar también favorece la obesidad infantil”, precisó.
Más actividad física.
Los diagnósticos de diabetes e hipertensión “han aumentado en los últimos años porque tenemos malos modos de vida”, aseguró. Ante esto, recomendó actividad física, aunque sea una caminata de una hora diaria, cinco veces a la semana, para que aumente la frecuencia cardiaca. Y una alimentación saludable y variada.
Sobre cuáles son los alimentos que no deberían faltar en tiempos en que las familias ajustan su presupuesto, respondió: “Lácteos, un niño después de los dos años puede consumir descremados. Frutas, verduras y carnes rojas en una mínima porción, dos o tres veces por semana, y después consumir pollos, pescados y legumbres. Comer menos harinas y evitar embutidos, fiambres y fritos”.
Atención en posta
Dos veces por semana, las médicas del hospital de Winifreda Daiana Lebed y Leticia Ferrando, viajan a la vecina localidad de Mauricio Mayer para atender a los pacientes locales y de Colonia Inés y Carlota. Realizan este trabajo porque la posta sanitaria del pueblo -ubicado a 20 kilómetros de Winifreda- desde este año no cuenta con una médica permanente.
Por su parte, la pediatra Florencia Carnicero, viaja cada 15 días para evaluar a niños con patologías y los controles del niño sano los hacen las doctoras. “Nos viene a buscar la ambulancia de Mayer. Ese vehículo y el de Winifreda funcionan. Estuve hablando con el subsecretario de Salud (Gustavo Vera) y existe la posibilidad que en algún momento nos puedan enviar un modelo más nuevo o en mejor estado a Winifreda”, dijo Lebed.
Ella y Carnicero desde hace unas semanas se trasladan a las escuelas de Winifreda para realizar aptos físicos a chicos desde los 6 hasta los 17 años de edad para saber si están en condiciones de practicar educación física.
“Es un examen físico básico donde se les controla la presión arterial, peso, talla, se evalúa la capacidad respiratoria, cardiovascular y ante cualquier anomalía citamos al niño o al adolescente al consultorio y hacemos las derivaciones correspondientes. También evaluamos agudeza visual para recomendarles anteojos, si es necesario”, explicó.
< Luis Barbaschi para LA ARENA 01/04/2018 >