Nuestro pasado está marcado por la pérdida y en la lucha contra la injusticia hemos forjado una identidad propia, hemos padecido tres despojos trágicos y aún estamos de pie.
A fines de la década de 1870 la expedición militar denominada "Conquista del Desierto" exterminó a los pobladores originarios del territorio, perpetuando el genocidio indígena que habían iniciado los europeos en el siglo XV.
Luego, en 1884, la ley n° 1532 de Territorios Nacionales permitió que las provincias vecinas nos arrebataran millones de hectáreas de tierra, que formaba parte del Territorio de la Pampa Central, tal como lo había establecido la ley nacional n° 947 de 1878.
Finalmente, en el siglo XX, la provincia de Mendoza nos despojó del Río Atuel creando un desierto en el oeste provincial donde antes había un vergel.
Hoy en 2018 el presidente de la nación Mauricio Macri pretende ejecutar el cuarto despojo quitándonos el Río Colorado.
Hemos resistimos los agravios, siempre hemos elegido la libertad y siempre hemos defendido nuestra tierra y nuestra identidad, porque es el compromiso que asumimos los pampeanos con nuestra historia.