Cuando el gobierno provincial anunció la reapertura del frigorífico de Bernasconi, puso unas cuantas fichas en la producción de cerdos. El reciente arreglo entre Macri y el país del norte habilita la exportación de limones a cambio de una importación que no cae bien entre productores.
El arreglo del presidente Mauricio Macri con los Estados Unidos, que habilita un canje para que Argentina exporte limones pero importe carne de cerdo, genera preocupación e inquietud entre los productores del sector.
Esa situación tiene impacto en La Pampa, sobre todo a partir de que el gobierno provincial presentó con toda pompa la reapertura del frigorífico de Bernasconi para dedicarse, justamente, a la producción de cerdo, además de bovinos.
El acuerdo del PRO con el vicepresidente de Estados Unidos Mike Pence es que la Argentina exportará 20 mil toneladas por año del cítrico a cambio de importar carne porcina estadounidense.
El canje no cayó bien en algunos sectores, que ya se vienen quejando por el notable aumento de las importaciones del producto desde que asumió Macri.
En el caso de La Pampa, la apuesta al sector la había hecho empresa HV S.A., que anunció con el gobierno la reapertura del frigorífico Bernasconi con la expectativa de que genere 60 puestos de trabajo directos (100 al año de comenzar la producción).
La firma accederá mediante un “leasing”, que implica que durante tres años pagará un “alquiler simbólico” de 60.000 pesos mensuales. Pasado ese lapso, los empresarios decidirán si les conviene o no la compra, que hoy se haría por $ 135 millones, una cifra que se actualiza de acuerdo al índice de la Construcción.
La empresa tomará posesión de la planta en 15 días, “cuando terminen los trámites de rigor”, dijo el ministro Ricardo Moralejo. Se supone que estará en funcionamiento en 4 o 5 meses, con 4.000 bovinos y 1.000 porcinos.
Los funcionarios mostraron optimismo cuando se hizo el anuncio: hicieron hincapié en que el frigorífico servirá para trabajar tanto bovinos como cerdo y aspiran a que se “involucre el ciclo completo” de producción. “Va a haber un importante aumento del movimiento económico de la zona”, interpretó el ministro de la Producción Ricardo Moralejo.
Impacto de las importaciones
Se estima que este año las importaciones alcanzarán las 50 mil toneladas, casi un 100% más que en 2016 provenientes principalmente de Dinamarca y Brasil. El año pasado el aumento fue del 120% respecto a 2015.
Juan Luis Uccelli, presidente de la Asociación Argentina de Productores Porcinos (AAPP), advirtió entrevistado en el portal La Política On Line, que "la medida sería desastrosa porque de esta manera corren peligro 35 mil puestos de trabajo".
"Reclamamos una competencia que se de en términos leales porque mientras Estados Unidos va a traer próximamente el primer cargamento de carne porcina, hasta ahora no le exportamos ni un solo limón", dijo.
Uccelli alertó además que la carne porcina estadounidense, al igual que la danesa, posee una grave enfermedad que podría poner en riesgo la salud humana en caso de ser consumida. "No se está priorizando el tema sanitario", denunció.
"La apertura de un mercado para un producto tan sensible, por lo general, demora entre dos y tres años de estudios. En este caso a fines de este año va a llegar el primer contenedor con carne porcina proveniente de Estados Unidos", agregó.
Federación Agraria
La única entidad rural que hasta el momento se manifestó sobre la apertura de las importaciones fue Federación Agraria (FAA). Directivos de esa entidad volvieron a mostrarse preocupados por la situación de los pequeños productores.
"No le estamos pidiendo al Gobierno que cierre totalmente las importaciones; pedimos que se ponga un límite a la entrada del producto porque viene aumentando de manera inusitada afectando el precio que reciben los chancheros", señalaron.
En los primeros siete meses del año se compraron unos 60 mil kilos de cerdo a Dinamarca sin importar el riesgo sanitario que implica para los consumidores locales por una enfermedad que afecta a los porcinos daneses.
En la Argentina, la participación del productor en el valor final del cerdo es de apenas un 15%. Mientras el valor promedio en origen es de $ 21,50 por kilo, los consumidores lo pagan en las góndolas de los supermercados a $ 140 por kilo.
La producción de carne de cerdo aumentó 5% en el primer trimestre del año en comparación con igual período de 2016, como consecuencia de un aumento de la faena del orden del 4% y un mejor peso promedio de la res faenada.
En 2016 el sector porcino exportó más de 6 mil toneladas por un valor superior a los u$s 8 millones, lo que significó un incremento del 21% en peso neto y un 44% en valor (los principales mercados son Rusia, Hong Kong, Kazajstán, Marruecos y Egipto).