FRIGORÍFICO GENERAL ACHA
Cuando los desempleados del ex Frigorífico General Acha (FGA) comenzaron a percibir sus haberes de indemnización por despido al cesar la actividad productiva de la planta local, uno de los ex delegados trazó un panorama preocupante para más de un centenar de operarios pero alentó la posibilidad de reapertura del emprendimiento, aunque sea con un 20 ó 30 por ciento del personal que se desempeñaba hasta que la firma achense resolvió suspender y luego abandonar su actividad.
En diálogo con LA ARENA, Valentín Wentenao, que se desempeñó como delegado de los trabajadores por el Sindicato de la Carne, reconoció haber aprendido y cometido errores, por lo que pidió disculpas “porque somos nuevos” en el oficio. Con Walter Espíndola asumieron el compromiso de respaldar a sus compañeros “por lo que nos correspondía”, dijo.
“Sabemos que hay gente en Acha un poco dolida, porque lo toman como que fuimos a meter quilombo y ahora principalmente a los delegados se nos están cerrando puertas por hacer los reclamos -porque es plata nuestra- y es el plato de comida que le corresponde a nuestros hijos, y junto con él aparecemos como buscavidas”, describió.
Reapertura.
“Sé que algún día se va a lograr. El frigorífico volverá a abrir. No sé cuando, ni cómo, ni por quién, pero se va a volver a abrir, porque hay una persona que está haciendo mucho por la planta y sigue empujando. No se quiere dar a conocer, pero es la única persona, que se ha reunido tanto conmigo como con el otro delegado y hemos mantenido reuniones. Es Lucrecia Barruti, que sigue gestionando para ver cómo nos pueden ayudar a nosotros, por la gente que fue despedida, no a los delegados. Somos 127 que quedamos en la calle”, sostuvo Wentenao.
Repitió que el objetivo apunta a reactivar la fuente laboral. También reconoció el acompañamiento del Sindicato de la Carne, con el cual continúan manteniendo relaciones, lo que han demostrado con su presencia cuando fueron requeridos.
Incertidumbre.
El ex delegado gremial sostuvo su preocupación por el gran número de operarios que quedó sin empleo y remarcó “si cometimos errores, pedimos disculpas”. Además enfatizó: “Queremos que se reabra con 20 ó 30 operarios, pero que se abra”.
En torno a esa posibilidad, el gremialista fue cauto, pero llegó a mencionar durante la entrevista, que existe una firma interesada en la planta frigorífica de General Acha, tal vez con expectativas de exportación de carne. Serian empresarios que operan en el mismo ramo, con instalaciones en la provincia de Córdoba y alguna otra en el territorio de Buenos Aires.
Con respecto a los despedidos del frigorífico, dijo que la mayoría está haciendo alguna changa, hay cinco o seis que trabajan en la empresa que repara la ruta nacional 35 entre Padre Buodo y Perú y otro ingresó en una estación de servicios de Santa Rosa.
“Juntémonos, sin banderías”
Wentenao comentó que en una reunión con la intendenta de General Acha, María Julia Arrarás, reprocharon “hasta cuándo vamos a seguir los achenses cruzados de brazos”. Enumeró temas y pidió por la inclusión de fuentes de trabajo. “Dejemos lo político a un costado y ver qué podemos traer para Acha. Sé que es difícil traer una empresa o una fábrica. Le dije hasta cuándo se van a llevar las cosas y nosotros cruzados de brazos. Juntémonos, sin banderas políticas de ninguna naturaleza, juntemos como pueblo”, acentuó.