POLÉMICA
En el marco del aniversario, Beloqui explicó cómo se ha desarrollado la milenaria actividad de la caza mayor y menor en La Pampa.
Una de las instituciones más pujantes de la localidad de Quehué es el Club de Caza Valle de Quehué, en este contexto, La Arena entrevistó a su presidente, Jorge Beloqui, quien explicó la controversia que genera la actividad y cuál es su punto de vista respecto al tema.
¿Cómo incide en la actividad, la ola mediática de caza de animales? “La caza es un tema muy reciente, criticado y debatido por los medios de comunicación. Pero lo cierto, es que los cazadores libramos a diario una batalla difícil de ganar, y es contra la desinformación de una gran parte de la población. Hoy en día tenemos un altísimo porcentaje de la población mundial que vive en las grandes ciudades, lejos de la naturaleza. La gente solo conoce a los animales por las películas, que nada tiene que ver con el mundo natural. La caza no es solo una actividad legítima y milenaria, sino que además es necesaria para el desarrollo humano. Somos preponderantemente carnívoros, pero la modernidad ha hecho que en las grandes ciudades, la gente no relacione la carne que compra en el supermercado con la muerte necesaria e inevitable de un animal. Suena ilógico, pero este es el fenómeno que vivimos. No comprenden que el proceso por el que pasa un novillo desde que nace hasta que llega a un frigorífico y se le da muerte, es muchísimo más cruel y antinatural que la caza deportiva. Solo imaginar a un animal que pasa los últimos meses de su vida encerrado en un corral sin poder caminar y comiendo maíz día y noche, para luego ser trasladado en condiciones a hacinamiento en un camión en el cual muchos animales se caen, y los otros animales los pisan, hasta que el camionero se percata de que el animal va a morir si no se levanta. Es ahí que con una picana eléctrica le da descargas hasta que el animal, extenuado y golpeado, se logra parar, solo para morir unas horas más tardes por un salvaje golpe en la cabeza, que muchas veces es mal dado, quedando la pobre bestia agonizando hasta que se le aplica un segundo golpe para dar fin a su vida. Por lo dicho, si alguien piensa que comprar un bife en el supermercado es más “natural” que cazar, entonces, evidentemente hay un nivel de desinformación atroz en la población. Por esto es que los cazadores nos cansamos de repetir lo mismo. Nosotros somos los verdaderos naturalistas, los que estamos del lado de la naturaleza. El proceso industrial de producción de carne es antinatural y cruel al extremo.
-¿Cómo es dirigir el club en un momento en el que la actividad está en tela de juicio? Las redes sociales están que arden contra la caza, algunas por falta de conocimiento y otras por las cosas feas que se publican a diario de animales abatidos. Tenemos que ser más cuidadosos. Creemos que nuestra función desde el Club es la de educar a las nuevas generaciones, a los niños; mostrarles lo bello que hay en la naturaleza y en la caza deportiva.
Estamos dispuestos a llevar adelante una iniciativa para tal fin, pero no contamos con recursos y herramientas para concretarlo. Estamos convencidos que la escuela primaria es el lugar ideal para dar el puntapié inicial, con el apoyo de las autoridades de aplicación que fiscalizan este deporte y por supuesto con los clubes. Por otro lado, estamos convencidos que la caza es una excelente actividad para educar a los chicos, la cual pueden compartir con sus padres, hermanos o amigos, manteniéndose alejados de las drogas, el alcohol y la vida ociosa que muchos jóvenes llevan en las ciudades, por eso nuestro compromiso y función será la de educar y formar a los jóvenes en esta actividad hermosa y natural.
Actividad, interés y protección.
Según Beloqui, la temporada más fuerte en La Pampa se produce entre marzo y abril que son los meses más intensivos de la brama del ciervo colorado y donde se produce la mayor visita de cazadores extranjeros y argentinos. No obstante, en los meses siguientes merma dicha actividad, pero se produce la caza intensiva del jabalí europeo.
Luego indicó que se mantiene firme el crecimiento del interés de cazadores extranjeros por visitar La Pampa en la época de brama. Los datos provienen de Recursos Naturales.
“En 2014, 558 deportistas de 6 continentes lograron cazar en La Pampa, se declararon 1.616 piezas de caza mayor y en 2015, recibimos 832 deportistas de 7 continentes y fueron declaradas 2.017 piezas de caza mayor”, explicó.
Y agregó que: “de acuerdo a nuestras estadísticas estimamos que un 20 por ciento de extranjeros visitan los cotos y campos de caza del Valle de Quehué”.
En relación al trabajo con el gobierno, resaltó: “Nuestra institución con principios netamente conservacionistas, desde su fundación siempre trabajó en conjunto con distintos organismos provinciales. Estamos trabajando para presentar una propuesta de reforma de la Ley de Caza 1.194, para que no resulte tan blanda”, afirmó.
Por otro lado, indicó que la ‘Fiesta Pampeana de la Caza Mayor y Menor del Valle de Quehué, “es un evento de singular importancia para nuestra provincia”. Además es la única en el país, en donde se agasaja y se premia la caza deportiva mayor, y por que representa una fuerte actividad turística cinegética, por la cual La Pampa es conocida en todo el mundo, tiene con serias aspiraciones de convertirse en una fiesta nacional. “Hace 5 años fue declarada de interés nacional y estamos en 20º edición. No obstante, este año al no contar con el apoyo necesario lamentablemente no la pudimos realizarla”, agregó Beloqui.
Historia.
La Asociación Pampeana Argentina de Medición de Trofeos del Club “Valle de Quehué” se creó el 25 de septiembre de 1986 por un grupo de cazadores deportivos entre ellos los Hoven, Ríos, Deluca, Oña, Fernández, Suazo, Gambuli, Soto, Avila, Villa, Beloqui, Sarasola, Biergue, entre otros.
“Ellos tuvieron a cargo la responsabilidad de dar el puntapié inicial en un largo camino de aprender a manejar un recurso natural tan delicado como la caza, es así que comienzan a difundirse y aplicarse las primeras leyes de fauna que trajeron alguna protección. A través del Club, se logró que lentamente los pobladores dejaran de cazar enormes trofeos que regalaban o exhibían en alguna cumbrera de un galpón y fue así que comenzaron a tomar consciencia del potencial faunístico que les había reglado la naturaleza, ayudada por don Pedro Luro”, explicó el presidente.
El ciervo y el jabalí podían llegar a ser una fuente de ingreso adicional a la pobre economía de la región y se comenzó a palpar la otra cara de la moneda al llegar los primeros cazadores interesados en llevarse grandes cornamentas con muchas puntas.
A partir de aquel momento había comenzado a escribirse otra historia, que llevaría varias décadas para desarrollarse. El primer curso de capacitación en La Pampa, se realizó en 1987 y tenía como fin, formar guías de caza junto a la Federación Argentina de Caza Mayor. Lentamente Quehué fue convirtiéndose en el epicentro de la caza mayor en Argentina.
“Actualmente dicha actividad en gran parte está apoyada por el Club Valle de Quehué. Somos el puente de comunicación entre el cazador, el turista y los servicios, brindando información y asesoramiento, ligados siempre a los distintos organismos y autoridades de aplicación del gobierno provincial. Además estamos encargados de fiscalizar esta actividad en la provincia”, indicó.
Libro.
Beloqui explicó que la ‘Guía de Medición de Trofeos de Caza Mayor’ es una producción de 72 páginas única en Argentina con los parámetros que se requieren para la fórmula del ‘Conseil Internacional de la Chasse’ y los parámetros de medición que se requieren para la Formula Argentina. “Es un logro importante para nuestro Club Valle de Quehué, ya que en esas páginas hemos querido reflejar las pautas que deben tener para medir un trofeo y así tratar de llenar el vacío existente en nuestro medio”.
Luego agradeció la colaboración desinteresada del Tiro Federal Argentino, a Cándido Vázquez, Antonio López Bueno, Carlos Cavero y Roberto Ignacio, sin cuyo aporte no hubieran podido llevar adelante este desafío. Para el club, es un importante logro que nos llena de orgullo como dirigentes ya que dicha Guía de Medición y nuestro Ranking Pampeano Argentino, recientemente fueron declarados por Decreto 383/16 de Interés Provincial por el Gobernador de la Pampa Ing. Carlos Alberto Verna”, concluyó.